¡Hola! ¿Cómo estáis todos?
Hablaría de economía, pero creo que ya sabéis todos de sobras de economía. Hablas con un taxista y entiende a la perfección el efecto del impuesto sobre el tabaco. Hablas con el albañil que arregla el baño y es un experto en empresas aseguradoras y por qué él no tiene culpa de nada. Hablas sobre política exterior, y todo el mundo ha estudiado historia macroeconómica y a los últimos Premios Nóbel. Y hablas con tu abuela y su edad le ha dado el poder de no necesitar datos, lo sabe todo ya. Tus últimas cuarenta asignaturas no son para tanto.
La pregunta tal vez sea por qué seguimos así si la gente sabe de estas cosas. Por qué permitimos que las empresas de energía sigan sobornando a los partidos que votas para poder subir nuestros precios, o por qué las empresas que deberían de tener problemas financieros (como los bancos, o las de seguros) son las más rentables del país. O por qué nos sigue pareciendo injusto el sistema de impuestos.
Voy a contar la curiosidad de Martin Shkreli. Todo el mundo declara públicamente que le odia. Es un tipo que compró una farmacéutica con un remedio clave en el tratamiento de enfermos del sida. Y ahora lo vende cincuenta veces más caro. Ha dado alguna excusa ("no, que uso el dinero para investigar." "no, que tengo que mejorar el producto y eso necesita dinero."
Pues bien, ha colado, por la sencilla razón de que es una empresa más. Todas las empresas que investigan cosas usan esas excusas para ganar más dinero. Algunas han firmado acuerdos, por lo cual no pueden hacer esas cosas. Pero sacan todo lo que pueden. El sistema de patentes está sobreexplotado, tanto que hay inestigaciones e inventos que no usamos porque cobran demasiado. Es la moda.
Cambiando de tema, voy a hablar de Sicko. Película/documental de Michael Moore. Película donde habla sobre las consecuencias de que la sanidad en EEUU sea privada. Tiene unos años, la hicieron antes del obamacare (creo que ya lo han quitado), y algún tema está ya resuelto/retrasado, aunque otros sigan en pie.
Mi conclusión favorita es que el mercado no es justo ni lo intenta, y que hay que meter mano, sea el estado o los individuos que viven en él, para tener algo parecido a lo que queremos. Al igual que no privatizamos la sanidad, la policía, los bomberos, los colegios, o los jueces, hay muchos aspectos de nuestra vida, como alimentación, educación, o trabajo donde el estado se va a meter mucho más a la larga.
La frase que voy a decir, por hablar de economía mientras cierro la entrada, es "Largo plazo". El gran problema es que la gente quiere cosas buenas en el momento, y votan al político que se las ofrece. Da igual que no cambie el sistema de pensiones, ni mejore la educación, ni cosas así. Intentan ligarse a la chica guapa para una noche de fiesta, sabiendo que mañana por la mañana se les habrán pasado las ganas y irán a por otra. Y el problema de la economía es precisamente que muchas cosas, casi todas las mejoras posibles, se deben de hacer pensando en el largo plazo. No se puede cambiar la educación y que afecte a la economía de un año para otro. Tampoco se puede cambiar el sistema médico, o la deuda del país para que de un año para otro cambie la situación y beneficie a todo el mundo. Ni se puede eliminar el desempleo de un año para otro. Se haga lo que se haga, se tiene que pensar en que no va a tener efecto antes de estas elecciones, o de las siguientes, o pensar que no se podrá medir bien. La mayoría de las investigaciones se hacen a ciegas y bien que nos vienen.